La logística indispensable para aumentar la competitividad del país
La carretera México-Querétaro podría ampliar su superficie de rodamiento a cuatro carriles que serían exclusivos para el transporte de carga que utiliza esta vía además de la ampliación del segundo piso del Periférico para que el tránsito vehicular sea más ágil.
Esto lo dijo el secretario de Comunicaciones y Transportes, Gerardo Ruiz Esparza, durante su participación en el Foro The 25th Anniversary México Summit, organizado por The Economist, en donde se habló del tema El Boom de la Infraestructura, Análisis y Oportunidades.
Explicó que este análisis es parte de ver a la logística de infraestructura como el futuro del transporte para apoyar la producción nacional, “este es un tema al que se le debe prestar mucha atención, ya que en el futuro será sinónimo de innovación y productividad entre los países, porque es la forma en que la planta productiva puede disminuir costos y ser más competitiva”, dijo Gerardo Ruiz.
El Secretario agregó que, en lo que toca a la Secretaría de Comunicaciones y Transportes (SCT) del Programa Nacional de Infraestructura para cumplir esta meta se construyen 52 nuevas autopistas para ampliar la red carretera en tres mil kilómetros, además del mejoramiento de 80 carreteras federales
“Esto se suma a la calificación que hace la OCDE de nuestro sistema ferroviario de carga, al considerarlo como de los mejores del mundo por su equipamiento y capacidad de traslado. También se están ampliando los puertos, pues representan el medio por el que más del 80 por ciento de las mercancías se mueven, se trabaja en los puertos de Manzanillo, Lázaro Cárdenas y Veracruz, así como el nuevo puerto de Tuxpan, el cual será el más cercano a la ciudad de México”, explicó.
Sobre la forma en que se han financiado estas obras explicó que no ha sido con dinero público, sino con recursos privados o asociaciones públicas-privadas. Modelo que también se utiliza para el Nuevo Aeropuerto de la Ciudad de México, que iniciará su construcción con un crédito de tres mil millones de dólares con ocho firmas bancarias.