La obra tendrá 3 mil 700 metros cuadrados de construcción y contará a los lados con un espejo de agua
Un total de 40 proyectos de diseño arquitectónico participaron en el Concurso Nacional para el Diseño del Pabellón Mexicano, el cual será parte de la Exposición Universal de Milán en 2015.
Entre dicha competencia, convocada por ProMéxico, resultaron ganadores el arquitecto Francisco López Guerra en colaboración con Jorge A. Vallejo y Juan Guzzy.
Al respecto, López Guerra señaló que la forma que buscaron resultó básicamente del concepto del maíz, pues México es un exportador que ha dado al mundo más de 150 especies alimenticias, siendo el maíz la más importante. Explicó que el maíz cuenta con una piel o cáscara llamada totomoxtle, misma que tiene las formas que trataron de evocar en la fachada del inmueble.
El arquitecto precisó que se trata de una idea temática que bien puede ser el concepto museográfico, pero que en definitiva se propuso como el diseño arquitectónico del edificio, por lo que entra en la categoría de edificios de gran actualidad por su sencillez, por las formas orgánicas y esa relación arquitectónica tan importante que tiene.
La obra tendrá 3 mil 700 metros cuadrados de construcción y contará a los lados con un espejo de agua, una parte importante del desarrollo de los terrenos donde se construirá.
Asimismo, la estructura, según el arquitecto, tiene que ser sumamente ligera porque se trata de un edifico efímero que pasado el evento tendrá que desarmarse, por lo que estará hecho de una membrana de vinil.