Para este proyecto, los arquitectos solicitaron la ocupación máxima permitida de 170m2
El despacho de arquitectos asociados Terra e Tuma, construyeron una casa en un terreno largo y estrecho de tierra que mide 170.0 m2 divididos en 5.6m de ancho por 30.0 m de largo, lo que representa una situación muy común para los habitantes de Sao Paulo, Brasil.
El proyecto comenzó en el 2015, siendo sólo el alzado frontal libre de interferencias por parte de los edificios alrededor.
“El desafío se incrementó desde el momento en que teníamos que cumplir con un amplio programa para esta área, lo que nos llevó a la ocupación máxima permitida, 170m2”, comentó uno de los arquitectos involucrados en el proyecto.
Además de la forma tan peculiar en la que la casa fue construida, también idearon la forma para que los dormitorios ocuparan la parte de abajo, lo que le dio a las habitaciones un carácter más íntimo y cómodo.
Esto generó la idea de integrar la losa del techo al área social en el segundo piso para ser utilizada como zona de recreo sin interrupción por parte de los dormitorios.
Finalmente, con la ayuda de Gabriella Ornaghi, arquitecta en paisajes, uno de los patios fue convertido en un espejo de agua, fue colocada una terraza al aire libre contigua a la sala y un gran árbol para adornar la cubierta superior.
“Una vez más, con escasos recursos pero una gran cantidad de compromiso de proponer caminos a seguir que se convierten en el pensamiento crítico en una obra viable”, aclaró uno de los miembros de Terra e Tuma.