Durante la presentación de su #libro “#Diego Villaseñor, #Architecture and Nature”, el #arquitecto resaltó la importancia de que el ser humano armonice su espacio con la #naturaleza
El arquitecto mexicano Diego Villaseñor, socio fundador y director de #DVA Diego Villaseñor Arquitectos y Asociados, presentó el día de hoy el libro “Diego Villaseñor, Architecture and Nature”, en el cual se recopilan obras construidas en la Ciudad de México, Morelos Nayarit, Estado de México, Los Cabos, entre otros.
Este profesional ha sido el creador de casas, hoteles y desarrollos turísticos en México, Latinoamérica, Estados Unidos, Europa y Medio Oriente, destacando obras que ha creado en la costa del Pacífico mexicano como la de Careyes, Punta Zicatela y Punta Ixtapa.
El estilo de su #arquitectura orgánica, armónica y emocional, rescata los valores mexicanos antiguos y contemporáneos del arquitecto, los cuales se pueden apreciar en esta publicación que celebra su trayectoria profesional.
Al respecto, Diego Villaseñor indica que él inicia un diseño a partir del sitio, las necesidades y expectativas de los que vivirán en esa #construcción, ya que la arquitectura debe tener magia, misterio y belleza, y ser desarrollada con gran eficiencia tecnológica.
Diego Villaseñor ha sido profesor de la Universidad Nacional Autónoma de México, la Universidad Autónoma Metropolitana, el TEC de Monterrey, la Ibero y la Anáhuac, además que ha impartido conferencias en varios lugares del mundo.
Esta edición reúne las fotografías de una selección que ha sido cuidadosamente elegida con la finalidad de mostrar cómo conviven las ideas de vanguardia e identidad, así como la manifestación plástica en diversas expresiones de lo íntimo.
La arquitectura de Villaseñor se devela en esta publicación para mostrar al lector la esencia de su filosofía, el cuidado espiritual hacia el oficio y el arte de la arquitectura.
“Queríamos que fuera un libro objeto, estamos orgulloso de él, de una arquitectura que sale de la tierra nuestra, la tierra mexicana. Este libro lo hicimos con mucho cariño, con mucho esfuerzo para que fuera el testimonio de lo que hemos descubierto en este proceso”.
Diego Villaseñor resalta que una de las personas que lo impulsó fue el arquitecto #Luis Barragán, a quien considera uno de sus puntos de partida, al enseñarle a ver de otra manera cómo es México, además que le enseñó a sacar de nosotros mismos nuestras raíces, entendiendo que somos una sociedad de formación todavía.
El libro se conforma por cuatro tomos en donde resaltan las obras residenciales más destacadas del arquitecto. “Decidimos tomar las casas porque la casa sigue siendo un problema para el arquitecto porque todos los cuartos de una casa son diferentes, a diferencia de un edificio de oficinas que tienes el vestíbulo y lo demás se reparte. Además, con los edificios tienes a muchos asesores porque ahora la arquitectura es así, platicas una idea frente al que trabaja las fachadas, el que trabaja en las instalaciones, el que trabaja en la estructura y todos se van a hacer su parte, en cambio, una casa no la puedes así, tienes que ir a conocer al cliente, las expectativas que tiene, ver la manera de vivir de ellos y es por eso que sacamos esto como nuestro problema más difícil al que nos hemos enfrentado”.
El arquitecto explica que cuando se construye una casa, ésta es como la imagen y representación de una familia o de una persona por lo que dijo no estar muy convencido de que las personas manden a hacer sus casas ya que cada quien debería diseñar su hogar, como se hacía antes.
“Yo tengo que ponerme a analizar a la familia y ver de qué manera van a vivir y resolverle arquitectónicamente, estéticamente bajo cuatro premisas: uno, que funcione, saber que las actividades que se van a desarrollar ahí funcionen; dos, que tenga un sentido emocional, si tu entras a una arquitectura que te pone la piel chinita, entonces quiere decir que es una arquitectura que te emociona; tres, la belleza, algo muy importante porque te armoniza al tener buena orientación, buena luz y armonía; cuatro, que tenga arquitectura de muros”.
Explicó que la arquitectura tiene que ver con el arte de vivir, ya que lo que queremos en este mundo actual, con tanta frivolidad, es hacer una cultura adecuada con el ser humano.
“Si hacemos que el ser humano comparta esta parte de la naturaleza, se va armonizar mejor y va a sacar lo mejor de sí mismo, al final ese es el trabajo de nosotros los arquitectos”.