El arquitecto Abraham Zabludovsky fue uno de los máximos exponentes de la arquitectura mexicana y uno de los pilares de la arquitectura contemporánea
Más de 200 obras arquitectónicas, que incluyen residencias, unidades habitacionales, edificios bancarios y centros culturales, es el legado que dejó el arquitecto Abraham Zabludovsky Kravesk, quien hoy, a 95 años de su nacimiento, es recordado como uno de los máximos exponentes de la arquitectura mexicana y uno de los pilares de la arquitectura contemporánea.
Nacido en Polonia el 14 de junio de 1924, Abraham Zabludovsky llegó a convertirse en un gran arquitecto y pintor. Egresó de la Escuela Nacional de Arquitectura de la Universidad Nacional Autónoma de México, en donde recibió mención honorífica por su tesis ‘Unidad de habitación colonia Hipódromo’. Este profesional murió el 9 de abril del 2003.
Trayectoria profesional
Desde temprana edad laboró en el taller del arquitecto Mario Pani y para 1950 comenzó su práctica profesional de manera privada. Su obra es caracterizada por retomar la tradición de la arquitectura mexicana, así como por relacionar el interior de los edificios con el espacio público.
Abraham Zabludovsky fue académico emérito y fundador de la Academia Nacional de Arquitectura, así como miembro fundador del Centro de Arte y Comunicación de Buenos Aires, Argentina.
Además, el arquitecto fue miembro del Colegio de Arquitectos de la Ciudad de México, miembro honorario de The American Institute of Architects y profesor de la Academia Internacional de Arquitectura de Sofía, Bulgaria.
Obra y Premios
Dentro de sus obras destaca la remodelación y ampliación del Auditorio Nacional, el Museo Tamayo Arte Contemporáneo en la Ciudad de México, las Oficinas Centrales del Infonavit, la Embajada de México en Brasilia, Brasil, así como el Edificio del Colegio de México, todos ellos en colaboración con el arquitecto Teodoro González de León.
De manera individual hizo destacables trabajos como el Teatro de la Ciudad Emilio Rabasa, en Tuxtla Gutiérrez, Chiapas; las Oficinas Centrales del Banco Bilbao Vizcaya, en la Ciudad de México; la Biblioteca México La Ciudadela; el Teatro de la Ciudad, en Aguascalientes; el Auditorio del Estado de Guanajuato; el Conjunto Habitacional La Cantera, en la Ciudad de México; el Taller-Estudio Abraham Zabludovsky; el Centro Cultural Sor Juana Inés de La Cruz, em San Miguel Nepantla, Estado de México; el proyecto de hotel en el Aeropuerto Internacional de la Ciudad de México, entre otros.
A lo largo de su trayectoria, su trabajo fue reconocido a nivel mundial con diversos premios. Ejemplo de ello, es que en 1982 obtuvo el Permio Nacional de Ciencias y Artes en Bellas Artes, mientras que en 1999 fue reconocido con el Gran Premio Latinoamericano en la Bienal de Arquitectura de Buenos Aires. Para 1989, obtuvo Premio del Instituto Mexicano del Cemento y del Concreto, y en 1991 fue distinguido con Medalla de Oro en la Bienal Mundial de Arquitectura, en Sofía, Bulgaria.
Aunado a estos premios, también recibió la Presea Ciudad de México, Medalla de Oro en la Bienal de Arquitectura de México, Premio de la Sociedad Mexicana de Geografía y Estadística, Creador Emérito de Artes, el Gran Premio Ex Aequo en la Segunda Bienal Internacional de Arquitectura de Brasil, Mención de Honor Internacional en la Bienal Panamericana de Arquitectura de Quito, así como Premio VITRUVIO, en Buenos Aires, Argentina.