El INAH propuso una concepción más amplia en la que monumentos y sitios sean vistos como parte de un paisaje comunitario y natural
Esta semana en el Centro Cultural de México Contemporáneo dieron inicio las jornadas para conmemorar el Día Internacional de los Monumentos y Sitios, mismas que continúan en el Instituto de Geografía, en Ciudad Universitaria.
El tema es el fino equilibro entre la conservación del patrimonio cultural y el turismo, un hilo delgado del que depende la sostenibilidad del medio ambiente e incluso la idea de comunidad.
Esta celebración ha congregado a una serie de especialistas que se reunirán hasta el viernes próximo para debatir y realizar propuestas en las que pasado y presente no se autoexcluyan sino complementen.
Para ello, el Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH), como una de las instancias convocadas por el Comité Nacional Mexicano del Consejo Internacional de Monumentos y Sitios (Icomos) a estas jornadas, propuso una concepción más amplia en la que monumentos y sitios sean vistos como parte de un paisaje comunitario y natural.
En un comunicado el INAH explicó que es claro que sin políticas de conservación no habrá turismo sustentable; además, éstas no recaen en las propuestas que puedan realizar algunos desarrolladores turísticos, sino en las bases que instituciones como el INAH dan a partir de sus investigaciones y evaluaciones científicas, ejemplo de ello es la actualización que el instituto ha realizado de su Catálogo Nacional de Monumentos Históricos Inmuebles.
Cabe destacar que hasta diciembre de 2016, el INAH había clasificado 116,250 fichas que hacen referencia a las características físicas, estado de conservación y la relevancia histórica del inmueble en cuestión, información que ha sido además clave para lograr las declaratorias de 59 zonas de monumentos históricos en el país, siendo las más recientes Cuautla, en Morelos, así como Real de Catorce, en San Luis Potosí.
El comunicado detalla que este año, México cumple 30 años de figurar en la Lista del Patrimonio Mundial de la UNESCO, y que en 1987, seis bienes del país fueron inscritos en el listado, entre ellos el Centro Histórico de la Ciudad de México y Xochimilco.
El Día Internacional de Monumentos y Sitios gira precisamente en torno al tema “Patrimonio, turismo y sostenibilidad”, y tiene un enfoque desde el paisaje productivo, por lo que es momento de voltear a ver el conocimiento que sobre el manejo de los recursos naturales han legado los pueblos originarios.
Graciela Mota Botello, presidenta del Consejo Directivo Nacional del Icomos México, enumeró que los planes de movilidad, turismo masivo, gentrificación, efectos del cambio climático, transformación del paisaje urbano histórico, desastres naturales, asimetrías culturales y especulación financiera sin regulación, constituyen factores de riesgo en detrimento de la integridad y autenticidad de la correcta gestión de nuestro Patrimonio Mundial.
Para contrarrestar sus efectos, dijo, es necesario apostar por la construcción de capacidades, innovación tecnológica, revaloración de los conocimientos locales, acceso a la asistencia técnica, la cooperación y buen financiamiento; esto sumado a la credibilidad de la Lista del Patrimonio Mundial, la eficaz conservación y la debida funcionalidad de los planes de manejo de los bienes reconocidos por la UNESCO, sin soslayar también la sensibilización de diversos públicos y la participación de los actores y comunidades locales.
En su participación, el arquitecto Javier Villalobos Jaramillo, hizo un llamado a la ciudadanía a estar más atenta del patrimonio distribuido en los alrededor de 2,500 municipios del país, donde no hay una conciencia colectiva de lo que representan sus monumentos.
