El mercado latinoamericano no logró alcanzar las metas de 2022, pero se vislumbra que 2023 traerá un mejor panorama para industrias consumidoras
A pesar de que en 2022 la industria latinoamericana del acero presentó una caída moderada en su demanda, logró posicionarse como una de las regiones más resilientes. Debido a que consumió 46% del promedio mundial por persona.
Sin embargo, los resultados suscitados a noviembre de 2022 no fueron los esperados para la industria acerera. Ya que, la producción de acero bruto alcanzó 4,900 toneladas, 8.8% menos que en noviembre del año anterior.
Por otra parte, la producción de productos laminados incrementó en 0.9% con respecto al mismo periodo de 2021. Paralelo a ello, las exportaciones en octubre de 2022 se registraron en 662,200 toneladas, cifra que impactó de forma importante, puesto que significó un 25.1% menos que el año antecesor.
No obstante, el director ejecutivo de Alacero, Alejandro Wagner destacó que la industria presentará los mayores desafíos en 2023.
“El mercado latinoamericano presentará aumento debido a las presiones inflacionarias. Así como restricciones adicionales e incertidumbre políticas”, comentó.
Sumado a ello, se prevé que los precios de la gasolina continúen en aumento, lo que impactará de forma directa en la industria.
A pesar de ello, Alacero señala que la recuperación que se esperó en 2022, sí se dará en 2023. Debido a la normalización de las fricciones en las cadenas productivas, que impulsará el crecimiento de la producción en los sectores que consumen acero.