Previo a la restauración de la catedral, se realizaron una serie de estudios que permiten a los especialistas del INAH realizar un trabajo más detallado
Un grupo de especialistas coordinados por el Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH) realizan trabajos de restauración en la Catedral de Nuestra Señora de la Asunción, en Cuernavaca, Morelos, inmueble construido con piedra volcánica en el siglo XVI, que presentó daños severos a causa del sismo del 19 de septiembre de 2017.
La catedral sufrió afectaciones graves en distintos elementos de su arquitectura, como sus muros, cúpula, arcos, campanario, bóveda principal, entre otros. Por ello, previo al proceso de restauración, se llevó a cabo un escaneo con un georadar en los muros y bóvedas, con el fin de detectar huecos en las estructuras, mismos que ya han sido atendidos.
El coordinador de Monumentos Históricos del Centro INAH Morelos, arquitecto Fernando Duarte, informó que también se realizó un estudio de suelo para conocer el estado del terreno bajo la catedral, así como un levantamiento topográfico con el que, a través de un escáner, fue posible generar un modelo digital del inmueble para someterlo a un simulador de sismos y, posteriormente, conocer a detalle las partes más vulnerables de la catedral. Añadió que gracias a esta tecnología pudieron atenderse los daños localizados dentro de los muros.
Hasta ahora, la restauración del conjunto catedralicio tiene un avance aproximado del 77 por ciento, pues, además de los muros, se han intervenido la torre-campanario, cuyo tercer cuerpo presentaba riesgo de colapso; el arco triunfal, la bóveda principal y la cúpula, que presentaban grietas transversales y radiales.
De igual manera, se han realizado trabajos en muros que cuentan con pintura mural, que fueron protegidos por los restauradores.
“En los muros de la nave que cuentan con pintura mural y registraron grietas, se trabajó de la mano con el área de Restauración del Centro INAH Morelos, para no afectar su decoración. Buscamos la forma más adecuada, técnicamente, para consolidar la parte externa, a fin de evitar escurrimientos, y en el interior, se protegieron los aplanados con pintura mural”, comentó el arquitecto Duarte.
Los trabajos de restauración que se han realizado permitieron la apertura parcial de la catedral para las festividades de Semana Santa, sin embargo, Duarte señaló que los trabajos aún continuarán, pues falta realizar reparaciones en el exterior del inmueble y en otras áreas donde los daños no son de consideración.