Por Marco Velázquez
Riqueza histórica tangible de México
México es un país inquieto que busca renovar sus espacios físicos constantemente. Con el paso de los años siguen surgiendo nuevas e importantes obras de arquitectura y diseño que responden a la necesidad de innovación propuesta por grandes ciudades que son un referente a nivel mundial.
Sin embargo, los rincones de cada país ya guardan, desde siempre, importantes tesoros, que son el atractivo principal para cualquier turista. Se trata de su riqueza cultural y su patrimonio histórico, grandes conceptos que México guarda con singular celo.
Y es que el patrimonio no deja de ser atractivo, porque recuerda la herencia protegida por los antepasados, remonta a los grandes acontecimientos que dieron lugar a nuestro hoy y permite tener una perspectiva tangible o intangible de la identidad de un pueblo.
Los elementos del patrimonio histórico y cultural no son necesariamente palpables, sin embargo una gran parte de heredad de la sociedad mexicana, está constituida por construcciones antiguas que son testimonio de un trabajo de conservación a través de muchas generaciones.
Dicha riqueza histórica se traduce también como una de las razones del crecimiento actual del país. Los espacios que se preservan y aprovechan generalmente para actividades turísticas, generan, sin lugar a dudas, beneficios económicos. Así mismo, muchos lugares reconocidos como patrimonio arquitectónico siguen siendo utilizados, por sus características, para actividades que generan recursos, fomentando así, el desarrollo del país.
No es novedad que el éxito económico de muchos países se debe a su fantástico manejo de estrategias turísticas para la promoción de sus espacios. En materia de turismo, algunos países se ven a sí mismos como una empresa y a su riqueza tangible como un producto o servicio que responde a la necesidad de un viajero.
Aunque existe un gran derrame económico para actividades tales como aventura, naturaleza, romance y convenciones, México cuenta con una gran cantidad de productos increíbles por difundir, que son a la vez un estandarte de identidad. Ejemplo de esto son las ciudades mexicanas consideradas patrimonio mundial (10 en total), los centros históricos de muchas de sus ciudades y los pueblos mágicos.
Del suelo a la nube
En un mundo completamente digital, parece que lo histórico debería quedarse a ras de suelo, para el disfrute de una experiencia completamente real, pero “de la vista nace el amor” y los viajeros hoy necesitan una atracción visual, práctica y dinámica antes de elegir su próximo destino.
Es importante mencionar que anteriormente, el turismo no dependía de la tecnología, los encargados de generar una experiencia de viaje de forma directa y presencial, eran los únicos que tenían la responsabilidad de atraer a los viajeros. Hoy, los procesos han cambiado considerablemente y se debe estar actualizado para tener presencia en el mundo.
Debido a lo antes planteado, muchos países implementan estrategias de marketing de destinos a nivel digital, ¿cómo? Utilizando herramientas online para promocionar sus mejores cualidades turísticas.
Algunas estrategias consisten no sólo en diseñar páginas web exclusivas del país, si no hacerlo pensando en mensajes profundos que generen una decisión.
México está tomando fuerza en el mundo digital a través de diversos programas turísticos. Actualmente se tiene un objetivo sólido para fortalecer la imagen del país y posicionar la grandeza de sus “productos” o atractivos, a través de canales digitales que permitan segmentar de forma cuidadosa el mercado que anhela conocer la riqueza histórica mexicana.
Además, individuos comprometidos con el país, independientes e incluso grandes empresas reconocen la importancia de difundir las riquezas históricas del país y así contribuir activamente a su crecimiento económico. Esto representa un “ganar-ganar”, por lo que se han creado cada vez más sitios web con contenidos visuales atractivos que generan experiencia, las redes sociales cuentan historias de los monumentos y nacen campañas que hablan constantemente de la fuerza cultural e histórica como una evidente.
Marco Velázquez escribe sobre marketing, comercio electrónico, tecnología y estilo de vida. Le gusta la música y el arte.
Twitter: @markobe88