El crédito hipotecario nacional se divide en dos partes: esquemas públicos, utilizados en los segmentos de bajo costo, y los préstamos bancarios, utilizados para la adquisición de segmentos residenciales y premium
Durante los primeros meses del año, el crédito hipotecario nacional se ha dividido en dos grandes grupos: por un lado los esquemas públicos, que se han consolidado como el principal impulsor de la adquisición de vivienda, y por el otro las hipotecas bancarias.
De acuerdo con Propiedades.com, los esquemas públicos cuentan con mayor demanda debido a que atienden a los trabajadores de menores ingresos y cubren la adquisición de viviendas de bajo costo, mientras que los créditos bancarios facilitan la adquisición de segmentos residenciales y premium.
La Comisión Nacional Bancaria y de Valores (CNBV) señaló que, al cierre de 2024, la colocación nacional de créditos hipotecarios ascendió a 521,000 millones de pesos (mdp). De este total, las hipotecas bancarias sumaron 278,000 mdp, equivalente a un incremento de 1.35% respecto al año anterior. Al cierre de mayo de 2025, los institutos públicos acumulaban una colocación de 224,000 mdp y la banca comercial reportaba 106,000 mdp.
Información de Propiedades.com y Creditaria señala que, durante el segundo trimestre del año, el Infonavit encabezó la intención de crédito habitacional con 53% del total registrado, impulsado por la accesibilidad de las condiciones para trabajadores formales de ingresos medios y bajos. En tanto, el Fovissste concentró el 7% de las solicitudes.
Los créditos bancarios alcanzaron el 40% de las solicitudes, gracias a la flexibilidad en plazos y montos, así como a la posibilidad de acceder a segmentos medio-alto y plus.
Creditaria también detalló que 82% de los créditos se destina a la adquisición de vivienda. Las propiedades nuevas encabezan la demanda con 50%, mientras que las usadas representan 32 por ciento. Los inmuebles de 0 a 10 años de antigüedad concentran los montos de financiamiento más altos, con promedios cercanos a 1.6 mdp; por el contrario, las propiedades de 20 a 30 años presentan los montos más bajos, con menos de 400,000 pesos en promedio.
¿Quiénes acceden a un crédito hipotecario?
Creditaria señaló que la edad promedio de contratación de un crédito hipotecario es de 39 años, con ingresos de alrededor de 36,000 pesos mensuales. En ese sentido, los millennials encabezan la contratación con más de 68,000 mdp en créditos, seguidos por la Generación X con 44,000 mdp y, en menor medida, los baby boomers y la Generación Z.
En cuanto al tipo de empleo, el 72% de los solicitantes son asalariados del sector privado, mientras que el 24% corresponde a trabajadores independientes y apenas el 4% a empleados del sector público.
En conjunto, los datos de Propiedades.com y Creditaria señalan que, en el crédito hipotecario nacional, los esquemas públicos siguen siendo esenciales para el acceso a la vivienda, mientras que los créditos bancarios y los perfiles más jóvenes impulsan una transformación del mercado.









