Contar con espacios verdes en una vivienda es un valor añadido, teniendo en cuenta que esto ofrece mayor estética, además de beneficios para la salud. En este sentido, en la actualidad se han puesto de moda las cubiertas ajardinadas, es decir, poder disfrutar de un jardín en el tejado de la casa. Sin duda, una idea que está ganando cada vez más adeptos, debido a todas las ventajas que ofrece.
Como se ha mencionado, a todo el mundo le gusta tener un jardín en casa, sin embargo, es importante a la hora de instalarlo, saber dónde se quiere ubicar exactamente. En este sentido, hay que decir que, en la actualidad, las cubiertas ajardinadas están cobrando protagonismo, ya que permite tener prácticamente un jardín en el tejado de casa, pudiéndose convertir en una de las mejores zonas de la misma.
En muchas ciudades, este tipo de cubiertas se han convertido en una buena alternativa sostenible para las viviendas, es por ello que cada vez son más las personas las que apuestan por instalarlas en sus hogares.
¿Qué son exactamente las cubiertas ajardinadas?
Tal y como su nombre indica, este tipo de cubiertas combinan las que son tradicionales para los tejados de las casas, con espacios verdes, es decir, elementos vegetales que aportan funcionalidad y sostenibilidad a la zona. El objetivo de las cubiertas ajardinadas no es otro que establecer un espacio en la casa que esté en perfecta armonía con la naturaleza y la arquitectura.
Hay que decir que estos elementos vegetales se pueden añadir en la totalidad de la cubierta o bien, de manera parcial, en el caso de que se quiera combinar con el pavimento. En la actualidad, la gran mayoría de cubiertas que se pueden encontrar en el mercado se pueden ajardinar perfectamente, por tanto, da igual que se tenga una casa nueva que una vivienda antigua, sin duda, esto es una opción estupenda y muy efectiva.
¿Para qué sirven las cubiertas ajardinadas?
Las cubiertas ajardinadas, también conocidas como cubiertas vegetales, tienen muchísimas funcionalidades. Entre otras cosas, hay que decir que este tipo de cubiertas se utilizan para retener el agua en un espacio, así como para purificar el aire. De igual modo, otra de las funcionalidades de estas cubiertas es que reducen notablemente la temperatura ambiente, además de regular cuando es necesario.
También son elementos que promueven la biodiversidad en la ciudad, además de permitir un mayor ahorro de energía.
¿Cómo pueden ser estas cubiertas?
Las cubiertas ajardinadas las hay de varios tipos, al igual que las cubiertas tradicionales. En este sentido, todo va a depender de la inclinación de la estructura, así, las hay planas, que suelen contar con un cierre algo más inclinado que permite el desagüe; o también las hay inclinadas que, tal y como su nombre indica, cuentan con mayor inclinación.
Además de estos dos grandes tipos, hay otros subtipos. De esta manera, dentro de las planas están las cubiertas invertidas o las catalanas.
¿Cómo construir una cubierta ajardinada?
Una cubierta ajardinada se instala igual que las tradicionales, su mayor particularidad es que en su capa más superficial hay un sustrato vegetal. Para poder construirla de manera adecuada, es esencial que tenga varias capas.
Así, deben contar con soporte estructural y la capa de pendiente de hormigón. También con otra de impermeabilización geotextil; aislamiento térmico; lámina de protección y drenaje; sustrato vegetal; y los elementos vegetales que se le quieran poner al gusto.
Principales ventajas de las cubiertas ajardinadas
Además de las ventajas ambientales, estas cubiertas también ofrecen beneficios sociales y económicos. De esta forma, proporcionan un buen aislamiento térmico, al igual que un gran ahorro energético, algo que se nota claramente en las facturas.
Asimismo, son grandes aliadas para retener el agua de la lluvia, lo que permite no sobrecargar el alcantarillado. Además, producen oxígeno y reducen la cantidad de dióxido de carbono. Y, finalmente, también hay que decir que tiene un gran componente estético, dando un aspecto muy natural a las viviendas.
