Las intervenciones al espacio público que se han realizado desde la Fundación corresponden a los lugares en donde hay algún desarrollo de Vinte
De acuerdo con la Fundación Vinte, actualmente, seis de cada 10 espacios públicos como parques, canchas y plazas son considerados como inseguros en México, por lo que las familias ya no quieran salir a la calle.
No obstante, dicha Fundación, que preside Carlos Cadena Ortiz de Montellano, se ha dedicado a fortalecer el tejido social de las comunidades mediante la recuperación de espacios públicos.
Cadena explicó que la misión de la desarrolladora Vinte, desde su creación, no solamente ha sido construir inmuebles que cumplan con la normatividad vigente; sino también hacer conciencia del beneficio que significa trabajar con las comunidades.
“Creo que esa visión, el tiempo con el que lo hicimos y la pasión que le dedicamos derivó en un círculo virtuoso muy especial. Vinte ha construido más de 40,000 viviendas, y una casa de Vinte promedia duplicarse de valor en un plazo de 7 años; qué mayor ejemplo de valor compartido que esto”, señaló.
El presidente de la Fundación Vinte subrayó que ese es el diferenciador de la inmobiliaria; pues se crean comunidades estables, sanas y progresivas, en donde no solo se beneficiaban los clientes.
“Entonces, fuimos encontrando espacios públicos que estaban abandonados, que la mayoría de las veces se volvían lugares donde se vendía droga o donde se cometían delitos. Decidimos ir y recuperar el espacio público, pero no nada más pintarlos, habilitarlos y poner juegos nuevos o bancas, sino hacer una intervención social”, mencionó.
De esta manera, la Fundación se dedica a generar tejido social y comunidad a la hora de recuperar un espacio público; lo que consta de una intervención de cuatro a seis meses en donde, además, se realizan ligas de fútbol y basquetbol y centros de actividades múltiples.
Además, Cadena indicó que las intervenciones que se han realizado desde la Fundación corresponden a los lugares en donde hay algún desarrollo de Vinte; es decir, en distintas ciudades del Estado de México, Puebla, Hidalgo, Querétaro, Quintana Roo y Nuevo León.
“El secreto de generar una comunidad viva es no soltar, es estar presente, retirarte hasta que el espacio ya esté vivo y bien integrado; y que funcione un comité de vecinos o una especie de patronato local que administre bien el espacio que hemos intervenido”, afirmó.
Finalmente, el empresario aseguró que este tipo de intervenciones y el generar una comunidad fuerte, sana y progresiva es la gran vacuna de una sociedad a los grandes problemas que ésta puede tener. Y expresó que, cuando el espacio público se ocupa de forma positiva, resulta en un ciclo virtuoso para la sociedad y los que la integran.
