La densidad no es un factor de protección contra la pandemia; sin embargo, el acceso a los servicios que proporciona, ha sido esencial en la respuesta al Covid-19
De acuerdo con ONU-Habitat, el programa de las Naciones Unidas para los asentamientos humanos, la densidad urbana bien gestionada puede contrarrestar las tasas de infección y mortalidad por Covid-19.
Para promover una densidad adecuada de población, ONU-Habitat recomienda un mínimo de 15,000 personas por kilómetro cuadrado. Y aunque esta densidad puede tomar varias formas, las ciudades deben estar bien diseñadas y planificadas para evitar un posible hacinamiento; el cual se ha correlacionado con un aumento de las tasas de infección y la mortalidad.
No obstante, la agencia precisó que la densidad per se no es un factor de protección contra la pandemia; pero el acceso a los servicios, la demografía, las condiciones de salud preexistentes y la infraestructura social que proporciona han sido esenciales en la respuesta a la crisis sanitaria.
Agregó que, cuando la densidad está respaldada por un buen diseño y una prestación de servicios adecuada, puede permitir la conectividad y la respuesta a emergencias.
“Por ejemplo, al observar las diferentes medidas implementadas dentro de las ciudades, está claro que la densidad bien diseñada ayuda a movilizar el apoyo de emergencia; incluidos los servicios médicos, alimentarios y básicos para familias vulnerables y la prestación de atención domiciliaria durante los encierros que se vuelven más manejables hasta una escala particular”, explicó.
Beneficios de la densidad bien planificada para responder al Covid-19
- Las ciudades densas y bien planificadas a menudo tienen un mejor desempeño económico y más recursos para una respuesta de emergencia. La correlación entre la densidad y la prosperidad de las ciudades está bien documentada.
- Las densidades de población bien planificadas tienen una mejor prestación de servicios de salud y otros servicios esenciales; así como una mayor concentración de atención especializada y servicios como hospitales.
- Bien planificados, los entornos densos tienen una experiencia más sólida con la vida colectiva y organizada; y, por lo tanto, han sido mucho más capaces de adaptarse a las restricciones preventivas.
- La densidad bien planificada permite economías de escala y apoya la provisión de servicios básicos adecuados y asequibles para todos.