Agosto: Hay entre cinco y seis empresas internacionales interesadas en el proyecto, fundamentalmente chinas, coreanas, japonesas, canadienses, estadunidenses y alemanas
La Secretaría de Comunicaciones y Transportes (SCT) llevó a cabo la firma de las bases de licitación del Tren Rápido México-Querétaro, en el Centro de Congresos de la Ciudad de Querétaro, lo cual oficializa el proyecto del Tren de Alta Velocidad (TAV) que conectará a la Ciudad de México con Querétaro.
Según informes del titular de la Secretaría, Gerardo Ruiz Esparza, señaló que hay entre cinco y seis empresas internacionales interesadas en el proyecto, fundamentalmente chinas, coreanas, japonesas, canadienses, estadunidenses y alemanas, pero habrá que esperar a que hagan las propuestas definitivas, una vez que hay sido publicada la licitación correspondiente
Destacó que al tratarse de un tren de alta velocidad, la licitación debe ser necesariamente integral, es decir, que la empresa ganadora del concurso deberá hacerse responsable del material ferroviario y la obra civil en su totalidad
En ese sentido, garantizó que la obra del tren rápido no afectará una sola vivienda en la ciudad de Querétaro y tampoco afectará espacios públicos como áreas verdes, parques o espacios sociales, pues la idea es que con este proyecto todos salgan beneficiados.
Ruiz Esparza manifestó que serán tres factores fundamentales los que harán ganar la licitación del tren rápido México-Querétaro: costo, calidad y tiempo de entrega de la obra.
Cabe señalar que la obra tendrá una inversión total superior a los 40 mil millones de pesos, y entre los beneficios que traerá destacan la reducción del tiempo de traslado de México a Querétaro, de tres horas a poco menos de una hora, debido a que el tren se desplazará a una velocidad de 300 kilómetros por hora.
La longitud del tren será de 200 metros y tendrá 400 plazas de pasajeros, con una demanda estimada de 23 mil pasajeros por día. Además, durante su construcción, la obra generará 20 mil empleos directos y 41 mil empleos indirectos.
En ese sentido, mencionó que el tren rápido será amigable con el medio ambiente, ya que funcionará con electricidad y ello contribuirá a reducir las 95 mil toneladas de bióxido de carbono que arrojan al aire los automotores que hoy circulan y que se prevé dejarán de hacerlo una vez que opere el tren rápido.
