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Proponen guía para ciudades preparadas ante las lluvias

Urbanismo |

Incluye seis principios que aplicar para contar con calles más resilientes y mejorar la movilidad de sus habitantes

 

La Asociación Nacional de Funcionarios de Transporte de Ciudad, NACTO, lanzó una publicación que puede funcionar como guía para que las ciudades las ciudades puedan diseñar sus espacios públicos de forma que estén mejor preparados para el manejo del agua de lluvias.

 

La asociación, en colaboración con el área de Ciudades Sostenibles de la Fundación Summit, propone seis principios que aplicar para contar con calles más resilientes, así como la protección que hay que darles a los recursos naturales existentes en los entornos urbanos, la importancia de considerar la seguridad y movilidad de los habitantes y la optimización de la infraestructura para volverla sustentable.

 

Un ejemplo de calles que se puede encontrar en las ciudades son los bulevares, ya que la mayoría de las grandes avenidas fueron diseñadas para que los viajes en automóviles sean más eficientes; generalmente son anchas e inducen a que os automovilistas circulen a altas velocidad.

 

Nacto plantea que este tipo de avenidas tienen un potencial en cuanto a la reasignación del espacio vial y la identidad de la ciudad, por lo que considera que los árboles son uno de los elementos que se pueden aprovechar para ello. Propone que su superficie sirva para la absorción de agua de lluvia y que si se extiende contribuye a ordenar el tráfico y hacer que la calle sea más angosta para los automovilistas, lo que provocaría que disminuyan la velocidad.

 

De igual forma, plantea que cada 100 metros aproximadamente, los peatones puedan tener refugios mientras cruzan las calles, sobre lo que se recomienda extender las acercas más allá de la zona de detención de los vehículos. De igual forma, en las paradas del transporte pueden asignarse espacios para la vegetación que permita absorber las aguas de lluvia.

 

Otro elemento son los camellones, los cuales pueden ser aprovechados para poner infraestructura de bioretención de agua.

 

El espacio designado a ciclistas es otro punto importante, para lo que se recomienda considerar que el pavimento debe ser permeable para que sea seguro para quienes transiten en bicicleta.

 

Otro elemento que se encuentra en las ciudades es el congestionamiento de las calles de zonas comerciales, para lo cual se necesita priorizar medios de transporte para volver más eficiente el traslado en dichos sectores, lo que significaría que en orden de prioridad estarían los peatones, ciclistas, transporte público, camiones y al último los vehículos particulares.

 

Según la asociación es necesario introducir cuatro elementos de diseño: las canaletas, utilización de pavimento impermeable, reasignación vial y designar espacios a los vehículos de carga para estacionarse.

 

En cuanto a las calles residenciales, la guía indica que debería aprovecharse de instalar infraestructura para la retención de agua y que favorezca la movilidad segura de peatones y ciclistas en calles más angostas, obligando a los automovilistas a circular a menor velocidad.

 

 

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Hanae Pacheco


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