En 1999, Consorcio Hogar, en aquel entonces comandada por el tapatío Jorge Pereda, se convirtió en la tercera desarrolladora de vivienda en colocar acciones en Bolsa, siguiendo los pasos de Geo, que lo hizo en 1994, y de Consorcio Ara, que lo hizo en 1996.
Hoy, después de años de ser un auténtico zombie y de sobrevivir apenas la crisis que tiene contra las cuerdas a Geo, Urbi y Homex, Hogar recibe de la Comisión Nacional Bancaria y de Valores (CNBV), la autorización para deslistar sus acciones y cancelar su inscripción en el Registro Nacional de Valores.
Con esto, la firma que hoy encabeza Paul Davis Carstens, se convierte en la primer viviendera en abandonar voluntariamente el mercado de valores.
Y esto tiene sus implicaciones, porque hasta el 31 de agosto (apenas la semana pasada) Hogar representaba 4.61% de un muy maltrecho Índice Habita, que se completaba con Sare, que sumaba 16% y Ara, que era quien en realidad cargaba el indicador, al aportar el restante 79.55% de la muestra.
El 1 de septiembre, la Bolsa Mexicana de Valores, de José Oriol Bosch, presentó un Índice Habita Reloaded, que ya sin Hogar, tiene como decano a Ara, que aporta a la muestra 16.06%, y se complementa con cuatro vivienderas: Cadu, Geo, Homex y Sare, que representan 5.94%, 5.01%, 1.21%, y 2.27%, respectivamente.
La sorpresa viene porque el índice se complementa con dos firmas inmobiliarias no residenciales; Vesta, dedicada a naves industriales, que le aporta 46.89%, y Gicsa, especialista en centros comerciales, que suma el restante 22.61 por ciento.
¿Y Javer? ¿Qué hace ahí Homex? ¿Suena lógico incluir a Geo a pesar de los problemas de su Concurso Mercantil? Muchas preguntas… Ojalá que las respuestas estén encaminadas a consolidar un índice que aporte valor al mercado y al sector.
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